lunes, 19 de noviembre de 2012

La sonrisa





            La sonrisa, una expresión sencilla, tan expresiva y tan significativa, implica en ocasiones un verdadero esfuerzo, consecuencia de estados de ánimo adversos.

            La sonrisa es un indicativo de paz interior, de estar bien con uno mismo y con el entorno. La sonrisa es como una conexión de nuestra intimidad con el exterior, con quienes nos rodean, con quienes nos caen bien preferentemente.

            Para sonreír hace falta encontrarse a gusto, lo cual no siempre se da porque hay muchos que, pese a la voluntad pueden evitar ese oasis refrescante, reconstituyente en el desierto de nuestras adversidades. De todos modos, intentarlo es lo positivo.

            Quien sonríe tiene mucho terreno ganado en el campo de la conexión, porque una sonrisa da confianza, invita al acercamiento porque incluye buena dosis de apertura, incluso  de complicidad y de invitación.

            Una sonrisa es un escaparate que da una pista del estado interior de quien la ofrece. La persona que sonríe, en principio parece como sincera, agradable, abierta, sin cortapisas.

            La sonrisa puede ser franca, limpia, sin tapujos. Hay sonrisas irónicas, las cuales son como la expresión metafórica de la sonrisa. Con ellas quizá se exprese una opinión, un punto de vista opuesto al de la sonrisa espontánea que es la auténtica. Otras sonrisas son sarcásticas y éstas incluyen un cierto matiz de hipocresía, incluso de crueldad. También existe la sonrisa del triunfo, la de la satisfacción, propia de los momentos en que se consiguen logros previamente perseguidos.

            Las sonrisas, como las miradas, dan información sobre los estados anímicos y, apurando un poco más, de las intenciones del individuo sonriente.

            Existe un tipo de sonrisa que tiene un valor incalculable, es el de las personas que están pasando por malos momentos particulares y aun así se esfuerzan por agradar, por crear un ambiente de serenidad en torno suyo, a pesar de tener que realizar un esfuerzo  de generosidad por mantener un clima social, distendido.

            Sonreír es algo positivo porque a la par que libera de planteamientos negativos, creando una situación de equilibrio invita a la serenidad, a la confianza, a la liberación de prejuicios.

            Sonreír libera tensiones, relaja el espíritu, acorta las distancias, es el primer paso para entablar la comunicación, como fórmula de entendimiento entre las personas. La sonrisa es la clave para romper el silencio como paso previo a la iniciación de la conexión por medio de la palabra, de la conversación.

            Sonreír es recomendable, importante, puede que necesario, sí, seguro…, necesario, porque es una emisión de paz y confianza a la vez que un acto de liberación de tensiones y malestar internos.
           
Creado el 06.03.2010
José Teodoro Pérez
Noviembre de 2012

5 comentarios:

  1. Siempre he sido y me considero una persona risueña y alegre, me gusta sonreír porque siento que así la gente se acerca, no es preciso entablar una amistad con todo el mundo que se cruza por nuestro camino, sin embargo todo es mucho más bonito con una sonrisa, casi inconscientemente la otra persona percibe un buen ánimo, reacciona de otra forma, es increíble cuánto poder tiene ese simple y sencillo gesto.

    Hace años, por cuestiones familiares, habría dado cualquier cosa por recibir una UNA sencilla sonrisa de aquellas personas que pasaban a mi lado como si no existiera, eso me hizo darme cuenta de la importancia que tiene ese gesto, juro que habría dado lo que fuera porque sé y sabía que esa simple sonrisa me habría ayudado a salir de esos malos momentos o sino, ya que no eran solucionables sí me los habría mejorado. Luego, ya más tarde muchos años más tarde, tuve la suerte de contar con sonrisas y abrazos en el trago más amargo de mi vida, y siempre agradeceré ese gesto, esa paz que me llegó sin precisar de palabras. Conste que eran personas que no conocía, pero me hicieron sentir que estaban ahí mientras llegaban los míos.

    Sí, yo soy y seré siempre una persona que regalaré mi sonrisa a todos porque sé el valor que esta tiene.

    Besitos!! Y una sonrisa para ti!

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  2. FC, agradezco tu comentario en el que expresas tu punto de vista sobre el valor de una sonrisa, al tiempo que dejas traslucir alguna decepción por pasar algunos momentos de adversidad en los que hubieras necesitado el calor de la sonrisa.
    Estoy de acuerda: hay que sonreír aunque, aveces hay que hacer un esfuerzo, pero sin caer en la hipocresía; hay que transnmitir confianza, estimular al buen estado de ánimo.
    Saludos cordiales

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  3. Te dejo mis mejores deseos para que en estas próximas fechas de Navidad todo sea hermoso, feliz y lleno de bellos momentos junto a todos tus seres más queridos, eso es lo que hace que la Navidad sea un momento que deseemos disfrutar.

    Besos!

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  4. FC, ya ves el tiempo que ha pasado y tengo mis blogs abandonados. Voy a ver si pongo algo nuevo estos dias. Y..., a seguir sonriendo.
    Saludos cordiales.

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    1. Lo más importante es que la sonrisa nunca deje de estar y podamos sentirla, lo demás siempre permanece aunque el tiempo pase, y unas veces estamos por estos lares más a menudo y en otras ocasiones, tan sólo cuando las circunstancias nos lo permiten.

      Besos!

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